PICA es un raro trastorno alimenticio que lleva a las personas comer cosas tan asquerosas, como por ejemplo tierra, jabón e incluso cabello.
En términos simples, es la ingesta de sustancias no comestibles, las que pueden llevar a graves complicaciones de salud, como por ejemplo la obstrucción intestinal.
La nutricionista del Grupo Cetep, Camila Soto, a través de un comunicado explicó que el consumo de estas sustancias se clasifica como un trastorno de conducta alimentaria cuando persiste por más de un mes.
“Si bien algunos niños pasan por etapas exploratorias donde tienden a poner objetos en la boca, en PICA esta conducta se convierte en algo repetitivo y prolongado, lo que aumenta el riesgo de problemas físicos y mentales”, señaló.
Según indicó, cerca del 9% de la población mundial, es decir, unos 70 millones de personas, padece algún tipo de enfermedad mental que se relaciona con la alimentación, entre ellos, PICA, el que muchas veces se relaciona con problemas emocionales que impulsan este tipo de conductas.
Pero no es una práctica actual, según una publicación de la BBC, hace 2.500 años, el médico Hipócrates ya describía esta práctica en la Antigua Grecia.
Diagnóstico y detección de PICA
La detección de este tipo de trastorno se hace por medio de entrevistas que realizan profesionales en salud mental, donde se exploran los hábitos alimenticios visibles, además de señales emocionales y posibles trastornos asociados, indican desde el Grupo Cetep.
“Muchos de quienes padecen PICA aparentan llevar una dieta normal, pero el consumo de sustancias no comestibles es una conducta oculta que suele salir a la luz solo durante una evaluación profunda”, agregó Soto.
La especialista añade que una detección temprana ayuda a la recuperación de un paciente, reducir la duración y gravedad del trastorno.
Sera Young, antropóloga y profesora de Salud Global en la Universidad de Northwestern, en Estados Unidos, dijo a la BBC que este trastorno se puede registrar en zonas pobladas de la mayoría de los países. Incluso, añadió en una entrevista en 2019, que en Tanzania afecta a cerca del 40% de la población, pero que, dado a su conducta, suele ocultarse.
Entre los problemas que puede acarrear este trastorno, están las obstrucciones gastrointestinales o infecciones severas, las que pueden requerir atención médica urgente, además de contraer infecciones bacterianas o parásitos, especialmente aquellos que están en la tierra.
Soto explica que PICA puede afectar a personas de distintas edades, sin embargo, es más común en pequeños y adolescentes. En los más pequeños, el diagnóstico suele comenzar a los dos años, aunque entre los ocho y la adolescencia es más común, por lo que requiere vigilancia del entorno familiar.
“Los adolescentes que consumen, por ejemplo, jabón o cabello tienden a ocultarlo, lo que hace que estas conductas compensatorias no se detecten con facilidad. Crear un espacio en el que puedan expresarse sin temor es clave para abordar el problema desde el núcleo familiar”, indicó.
Casos y terapias
Koral Costa es modelo y esposa del actor colombiano, Omar Murillo, quien en 2024 participó en el reality La Casa de los Famosos Colombia.
Costa, señaló a Infobae que producto de la ansiedad que le provocó el ingreso de su esposo al programa, comenzó a comer tierra.
“Estoy sufriendo un síndrome que se llama síndrome de pica, que es que nos dan ganas de comer tierra. Últimamente, estoy sintiendo este deseo, desde que mi esposo entró a La casa de los famosos Colombia, me empezó a dar ansiedad y comenzaron las ganas de comer tierra”, indicó.
Según relató, al momento de la entrevista ya llevaba dos meses con esta conducta, consumiendo porciones mínimas o una cucharada de tierra.
Una de las teorías mencionadas por el Departamento de Antropología de Northwestern, tiene que ver con la suplementación y la desintoxicación, ya que los cuerpos “anhelan aquello que necesitan”.
Desde el Grupo Cetep, indican que para el tratamiento es clave la intervención temprana.
Las terapias contemplan tanto apoyo psicológico, como la ayuda de un equipo multidisciplinario que trabaje para mejorar el estado nutricional de la persona.
“Sin embargo, cada caso es único. En algunos, además de hierro, se incluyen otros suplementos como vitamina C o zinc para ayudar a reducir el estrés y mejorar el bienestar general del paciente”, enfatizó la doctora Soto.